jueves, 29 de agosto de 2024

Nuestra Señora de las Eras = Susín (Huesca)

 DESCRIPCIÓN


Nave rectangular cubierta con techumbre plana de madera, con cabecera recta, de menor altura, cubierta con medio cañón. Restos de coro bajo a los pies.

En el muro sur, puerta con dintel monolítico labrado a modo de arco, en el que destacan signos incisos grabados. Dos pequeños vanos en el mismo muro.

Cubierta exterior de losa a dos aguas.

Gobierno de Aragón



martes, 27 de agosto de 2024

La virgen de Pastoriza - La Coruña

 La Virgen de Pastoriza es la más popular, pero la comarca atesora otras muestras multitudinarias de fe bien conocidas, como los Remedios de Betanzos o la historia de Fray Pedro, de Coirós

Cuenta la leyenda que fue una niña, una inocente niña, la que un día divisó una estrella reluciente entre unos enormes penedos en la parte alta del monte. La chiquilla tenía la costumbre de echar sus vacas a pastar por aquella zona, un pastizal o pastoriza, ubicado en un lugar del concello de Arteixo, a solo seis kilómetros de la ciudad de A Coruña. Fueron pocos los que la creyeron al principio. Pero, hete aquí que, lejos de quedarse en una mera anécdota, la estrella volvió a refulgir una y otra vez al paso de aquellas vacas con la niña a su vera.
La virgen de Pastoriza, engalanada para la fiesta de este año. O Berce da VirxeEn la aldea se corrió la voz y la gente acabó creyéndola. Entonces, todos subieron al monte para escudriñar la zona hasta que, oculta en una oquedad bajo una gran piedra, apareció la imagen de la Virgen, que llevaba desaparecida desde hacía varios siglos cuando los cristianos la escondieron para librarla de las posibles agresiones de los invasores normandos y musulmanes. «¡Milagro!,», gritaban los vecinos. Desde ese momento, aquel hueco que convirtió la piedra en un milagro quedó bautizado como O Berce da Virxe y cada año se deslizan por debajo cientos de personas para librase de pecados o curarse de ciertas enfermedades. Esta es, según el etnógrafo Leandro Carré Alvarellos, la leyenda de la Virgen de Pastoriza, a cuya romería siguen acudiendo cada octubre fieles llegados desde numerosos puntos: Sobrado dos Monxes, Betanzos, Carballo, A Coruña... Según José Vázquez Landeira, párroco da la iglesia de Pastoriza, a día de hoy «sigue viniendo gente de toda Galicia. Hay grupos de personas que llegan desde Ferrol, donde se le tiene mucha devoción. Antes venían por mar», apunta. Este año no ha sido una excepción. El pasado 29 de octubre, la cueva se volvió a llenar de exvotos, velas y flores. A primera hora del día, ya había un reguero de creyentes subiendo por el recorrido escalonado de pocos metros que separa la cueva del santuario. A media mañana, los gaiteiros de Bieito Romero amenizaban la zona, los feirantes seguían distribuyendo su mercancía a buen ritmo y las tapas de callos llenaban las barrigas de los fieles, ruidosas en hora punta. Ni un alfiler cabía en la iglesia durante las nueve misas que don José dio el domingo.
Pero la historia de la virgen aún tuvo una segunda parte que recogió Emilia Pardo Bazán en su obra La leyenda de la Pastoriza, publicada en 1887, tras una visita de la escritora al santuario. Resulta que, cuando se produjo la invasión inglesa de Drake en 1589, unos soldados herejes sacaron de la iglesia a la virgen y la arrojaron cerca de la fuente, partiéndola en dos. Le cortaron la cabeza de un hachazo y le dividieron el cuello.
El espanto de los ingleses
Milagrosamente, la imagen se volvió a colocar ella sola y se unió la cabeza al cuerpo tal y como estaba antes, lo que los dejó boquiabiertos. Aquellos soldados, espantados por tal prodigio, huyeron sin robar ni incendiar ni hacer daño alguno a la iglesia, como tampoco en las casas de la parroquia de Pastoriza. Esta tradición estaba reflejada en un lienzo que durante años se conservó en la iglesia. Lamentablemente, según confirma el párroco, el cuadro desapareció.

La Voz de Galicia

lunes, 26 de agosto de 2024

Romería al Santuario de la Virxe da Franqueira - Pontevedra

 


Los montes de Paradanta albergan el Santuario de la Virxe da Franqueira, documentado como monasterio benedictino del siglo XI y hasta aquí llegan cientos de personas de Galicia y el Norte de Portugal para honrar a esta virgen, “alcaldesa” de A Cañiza, a cuya imagen se le dio culto ya en el siglo VII. Las dos multitudinarias citas con la Virxe da Franqueira (el lunes de Pentecostés y el día 8 de septiembre) son manifestaciones de devoción mariana que ocupan un lugar destacado entre las fiestas religiosas de Galicia y que, por su antigüedad, originalidad, son de interés turístico.

La primera romería es conocida como “As Pascuíllas” y se caracteriza por su gran vistosidad, ya que hasta el santuario llegan distintas procesiones, procedentes de las parroquias de A Cañiza y de municipios colindantes portando cada uno su talla (vírgenes y santos), adornadas con flores, y sus correspondientes pendones parroquiales y estandartes. Más de medio centenar de imágenes protagonizan después el acto de salutaciones a la Virxe da Franqueira en el atrio empedrado. Existe un protocolo por el que San Sebastián y la Virxe do Rosario son los primeros, por lo que se otro llega antes tendrá que esperar. Tras los actos religiosos, los puestos de pulpo, rosquillas, carne ao caldeiro, empanada, queso, miel… se llenan de público deseoso de adquirir los mejores productos de la tierra y por los alrededores del santuario los romeros disfrutan de la comida campestre.

A partir de las cuatro de la tarde, las procesiones vuelven a tomar el camino de vuelta para devolver las imágenes a sus iglesias y capillas. Para no perderse: Saludos y reverencias de las tallas de santos y vírgenes a la Virxe da Franqueira.

La romería de verano en el santuario de la Virxe da Franqueira, coincide con la natividad de la Virgen e, igual que la de As Pascuíllas en primavera, su fama traspasa las fronteras de Galicia. Los alrededores del santuario de la Virxe da Franqueira se llenan de devotos llegados desde todos los puntos de la provincia de Pontevedra y de Portugal. El momento más emotivo tiene lugar tras la misa solemne de las doce de la mañana, cuando la Virgen es llevada en procesión montada en un carro tirado por una pareja de bueyes con los ojos tapados (cuenta la leyenda que de esta forma guio a los paisanos hacia el enclave en donde tenía que construir su santuario). Durante su recorrido, se para a contemplar las antiquísimas danzas de Santa María da Franqueira y la representación del combate entre el príncipe moro y un devoto cristiano, en recuerdo de uno de los milagros más conocidos que se le atribuyen a la Virxe da Franqueira: la liberación de un cristiano preso en Argel. La fiesta religiosa acaba con la tradicional comida campestre en los alrededores del santuario. Para no perderse: Procesión de la Virgen montada en un carro tirado por bueyes engalanados

sábado, 17 de agosto de 2024

La Virgen de Moclón - Júzcar

 

La imagen de la Santa Virgen que se venera en Júzcar se llama de Moción, pues fue en ese sitio - monte áspero- donde se apareció por vez primera. 
Un día, un pastorcillo guardaba su hato de ovejas en ese monte de Moclón. Mientras el ganado ramoneaba, él iba de un lado para otro, cuidando de que ninguna oveja se apartara, cortando con su navaja algún trozo de madera o reparando su honda. Estaba la mañana clara; mas, a pesar de ello, vio que de un matojo de jara salía un extraño resplandor. Llegó allí, y quedó admirado y sin habla al ver una linda imagen de la Virgen. Se aproximó y, tomando a la imagen en sus manos, determinó llevarla a su casa, para que fuese venerada por sus familiares. Así lo hizo. La envolvió cuidadosamente en una piel de recental y la metió en el zurrón. Pero cuando llegó al pueblo y abrió el zurrón, ante la curiosidad de sus familiares y amigos, vio con sorpresa que estaba vacío. No sabía a qué atribuir la desaparición de la imagen, y tuvo que soportar las vayas y cantaletas de aquellos a quienes había anunciado su hallazgo.
A la mañana siguiente volvió a aparecérsele la imagen, y otra vez la cogió y la metió en una bolsa, diciendo: «Ahora estará segura». Pero de nuevo, cuando llegó al pueblo, la imagen había desaparecido. Una vez más, volvió a suceder lo mismo.
Al fin, la cuarta vez, cuando la encontró, creyendo que sería una aparición maléfica que trataba de burlarse de él, cogió la honda y lanzó contra la imagen un guijarro, que la hirió en la cara. Y corrió a dar cuenta a los clérigos de lo que le había sucedido. Éstos, después de reprocharle la acción, acudieron al monte, y, comprendiendo que era voluntad de la Virgen ser venerada allí mismo, levantaron una capilla. La huella de la pedrada no se pudo quitar, a pesar de las cuidadosas restauraciones.
Más tarde, esta imagen, adorada con gran devoción por los milagros que realizaba, fue trasladada a Júzcar.

(Vicente García de Diego)

miércoles, 14 de agosto de 2024

Nuestra Señora de la Barquera - Cantabria

La santa imagen que se venera en la entrada del puerto de San Vicente de la Barquera existe allí desde su llegada en tiempos remotos.

Una mañana trabajaban en la orilla unos pescadores de San Vicente. El día estaba claro, y el mar brillaba como una inmensa lámina de plata. Los pescadores trabajaban alegres, entonando canciones y cambiando bromas. De pronto uno de ellos gritó: «¡Mirad hacia el mar». Todos dirigieron la vista hacia donde les decía su compañero, y contemplaron  absortos cómo una barca venía navegando por el mar sin velas ni remos. Y en medio de la luz de la mañana, brillaba aún

más fuertemente, rodeada de una aureola de gloria. Llegó a la costa, entró en la ría y suavemente clavó la quilla en la ribera que estaba enfrente del pueblo. Entonces comprendieron que lo sucedido se debía a un milagro y cayendo de rodillas, elevaron sus preces al Señor

Mientras éstos hacían oración, la nave seguía brillando maravillosamente  y unos cuantos, montados en sus barcas, se aproximaron al sitio donde estaba la resplandeciente nave, y allí encontraron una imagen de Nuestra Señora con el Niño Jesús en sus brazos. Llegaron entonces los clérigos  y con gran alegría la llevaron en procesión a la iglesia de San Vicente.

Más tarde se levantó el santuario, y la imagen recibió el nombre de Nuestra Señora de la Barquera. Desde entonces fue objeto de devoción, especialmen

te por los marineros, de los cuales se ven muchos ex-votos en el templo. El día de Sábado de Gloria se hace solemne procesión llevando la Santa Virgen a la parroquial de San Vicente. El tercer día de Pascua, al atardecer, se la conduce a la orilla, embarccándola en una lancha adornada y volviéndola así al santuario. El pueblo celebra la fiesta con gran alegría, cantando unas canciones que llaman “picatostes”.

Vicente García de Diego



Virgen del Loreto =Higuera de Vargas (Badajoz)

Su patrona es la Virgen de Loreto y su patrón el Señor de los Afligidos. La Romería de la Virgen de Loreto y fiesta de las flores se celebra...