Se celebra el 15 septiembre.
Recuerdo cuando el día 15 de septiembre íbamos gran parte de la familia, junto a otras muchas, a pasar el día a la campa que hay junto al Monasterio del Santuario de la Virgen en lo alto de Hoz de Marrón. Subíamos al Collado entre Hoz y Bosquemado. Muchos iban por devoción, otros por tradición o por pasar el día, pero aquello era una auténtica romería. En lo más alto divisábamos La Sía y Los Tornos tirando más al sur.
Muchas historias se comentaban de la Bien Aparecida, historias que más parecían leyendas. Cuentan que unos niños pastores que subían sus ganados a pastar a lo alto de San Marcos, un buen día vieron un extraño resplandor que les llamó mucho la atención. La luz salía de la ermita de San Marcos. Con sorpresa vieron que en un pequeño ventanuco había la imagen de una Virgen, la que hoy conocemos como La Bien Aparecida (se cree que fue por el año 1.605). Pasados unos días y conocida la noticia en toda la región, se decidió trasladar la imagen de la Virgen a la Iglesia de San Pedro pues estaba en mejores condiciones que la de San Marcos. Pero una tormenta se lo impidió y creyendo la gente que lo que la Virgen quería era quedarse allí la llevaron a la iglesia de San Marcos y la colocaron en el altar conocido como el del Santo Evangelista. En el camino que habían recorrido pusieron una cruz a la que llamaron Nuestra Señora de la Cruz o también conocida como Nuestra Señora de Somahoz.
La figura de la Bien Aparecida es una obra gótica de finales del siglo XV aunque también puede ser de estilo hispano-flamenco. Pertenece a un tipo de muñecas conocidas como malines(por su aspecto de muñeca y por procedencia de malinas). En cuanto a su talla se ignora quien la modeló y su procedencia. La imagen con su pedestal mide 21 centímetros y medio y tiene el niño sobre su brazo derecho en actitud graciosa y extendiendo sus manos hacia una manzana que tiene la Virgen en su mano izquierda. La cabeza de la Virgen y el niño son redondas. La de la madre no tiene toca y rodea su cabeza una trenza, cayéndole los cabellos sobre los hombros. Viste manto y túnica y en el cuello lleva unas lentejuelas metálicas.
El manto está rematado por una cenefa tallada y calza zapato negro. Una vez fue descubierta muchísimos han sido los devotos que han pasado por el Santuario y los que pasaran año tras el 15 de septiembre.
Fue un cuatro de mayo de 1.670 cuando se creó la Cofradía de Nuestra Señora de la Bien Aparecida. Sus afiliados tenían que someterse a una serie de obligaciones para poder pertenecer a la misma. El cinco de diciembre de 1.905, la Bien Aparecida fue proclamada patrona de Santander y en el año 1.955 fue coronada por el Obispo José Equino y Trecu.
El Santuario de La Aparecida está situado en el término municipal de Ampuero, en el pueblo de Hoz de Marrón, en una paraje desde el que podemos contemplar una gran paisaje y donde el tiempo se detiene. Ahí es donde se encuentra el Santuario de la Bien Aparecida. Se acabó de construir en el año 1.722. Su exterior es sobrio en su construción, con fuertes muros de manpostería y firmes sillares. En el interior tiene forma de cruz latina con tres retablos de principios del siglo XVII y el del altar mayor es el más importante de estilo barroco y churrigueresco. Su color es dorado y mide 14 de alto por 10 de ancho.
Se cuenta que un famoso marinero de la época visitó a la bien Aparecida en su Santuario pidiendo y rezando a la Virgen para tener un buen viaje en la travesía que iba a comenzar pues le habían comentado que si se encomendara a la Virgen no tendría problemas en su navegación (la Virgen era abogada de los navegantes). Cuentan que durante el viaje se desató una tormenta y tanto el capitán como los marineros vieron como aparecía la Bien Aparecida sobre el palo mayor y al acto amainaba la tormenta quedando el mar en calma. Ante tan asombrosa experiencia los marineros y el capitán del barco donaron a la Virgen una corona de oro con piedras preciosas y otra para el niño,donaciones que fueron colocadas por doña María de la Riva. No sólo este fue uno de los hechos que hizo la Virgen sino que se cuentan varios más y la mayoría de ellos ocurridas en el mar.
En el año 1.846(según Madoz),existían en el territorio ibérico 4.300 santuarios dedicados a la Virgen. Hoy, la mayoría han desaparecido. Pero ese dato de antaño revela la gran devoción mariana que existía en esta provincia, donde en casi todos los pueblos hay un templo, una ermita o un santuario que venera determinada imagen. Sin duda una de las Vírgenes que más devotos recibe es La Bien Aparecida que como todos sabemos recibe todos los años miles de devotos en el día de su fiesta.
La vida en el Santuario pasa serena y pacífica, en un paisaje de ensueño donde la naturaleza se entrelaza con la arquitectura del templo. Y hoy, en el día de la patrona de Cantabria, recordemos una copla popular que dice
«Virgen de la Aparecida,
Virgen antes y después,
¡quién tuviera la cabeza
donde tú tienes los pies!».
No hay comentarios:
Publicar un comentario